viernes, 12 de febrero de 1999

Dependencia de las Urgencias

Existe últimamente un debate permanente entre algunas especialidades acerca de la dependencia de las áreas de Urgencias, si deben ser autónomas o integradas en otros servicios. Se nos solicita la opinión a las distintas sociedades científicas, por lo que gustosamente accedo a escribir unas líneas, que si bien pueden expresar la opinión captada entre los socios de Semergen (Sociedad Española de Medicina Rural y Generalista), algunos párrafos pueden verse influenciados por la experiencia vivida por un médico que ejerce en el medio rural desde hace veinticinco años.
De entrada es preciso afirmar algo que es evidente: quien atiende urgencias es una persona especial, por muchos motivos, y por lo tanto debe pertenecer a un “cuerpo” de elite. Debe ser alguien que esté preparado para afrontar el riesgo que supone atender situaciones límite y formado para responder eficientemente en cualquier circunstancia. Por lo tanto, debe ser un profesional formado en todas las áreas del conocimiento médico, o lo que es lo mismo, un Médico Generalista, especializado en urgencias. Pienso que en el curriculum formativo de la especialidad de Medicina de Familia, debería existir un período de formación específico en la atención de urgencias y además, quienes se dediquen a ello deben reciclarse, acreditarse y recertificarse frecuentemente. Estos compañeros pueden atender una situación urgente tanto en la puerta de urgencias de un hospital como en un núcleo rural aislado.
Existen dos situaciones diferentes respecto a la dependencia funcional de las áreas de urgencias, aunque debe haber una coordinación entre ambas: Atención Primaria y Hospital. En Atención Primaria, aparecen factores contradictorios a tener en cuenta como puede ser la necesidad de integrar las urgencias en la actividad normal de los centros de salud y el hecho de que son muchos los médicos de atención primaria que no desean hacer guardias. En este caso debería contratarse médicos de generales/de familia formados y acreditados en urgencias para suplir a los miembros del equipo de atención primaria que no deseen hacer guardias o estén eximidos de realizarlas, bien sea por edad, enfermedad o cualquier otro motivo. La continuidad de la atención y el registro de las actividades en el horario de urgencias, son acordes con la filosofía de la Atención Primaria.
La dependencia funcional, por lo tanto, de las áreas de urgencia debe ser directa del lugar donde se atienden: en la Zona Básica de Salud deben depender del Director del Centro de Salud, y en el Hospital, supongo que deben depender del Gerente del mismo. Otra cosa es la coordinación: esta debiera ser única, y no se ceñiría solo al aspecto sanitario, sino a todo lo que rodea las situaciones de emergencia: ayuntamientos, cuerpos de seguridad, protección civil, bomberos, obras públicas, etc.
Resumiendo: dependencia del lugar donde se presta la atención, coordinación única. Perfil del médico de urgencias: no es necesaria otra especialidad, ya que existe en la actualidad: la especialidad de Medicina de Familia, en cuyo curriculum habría que hacer mayor hincapié en el área de atención al enfermo en situación urgente, sin entrar en discusiones acerca de la situación actual, que está perfectamente cubierta por compañeros que aún sin tener lo que se debiera exigir en el futuro, están atendiendo urgencias igual que lo harán en el futuro quienes les corresponda con el título que quieran exigirles.
DR. Bernabé Galán Sánchez
Director de la Zona Básica de Salud de FuentePalmera
Presidente de Semergen-Andalucía